martes, 23 de setiembre de 2008

Perdí mi bebé, y mi derecho al acceso a la información

El Congreso, que actúa como una suerte de "padre biológico" de mi hijo adoptivo, como lo esperaba, se negó a darme la información que le solicité hace unos días sobre sus gastos operativos. Acabo de recibir una carta firmada por el Director General de Administración encargado Víctor Guerrero de los Ríos, argumentando que como la Mesa Directiva acordó disponer que se realice una auditoría especial en materia del proceso de rendición de cuentas... los informes y acciones de control se encuentran sujetos a principio de reserva.


La carta - muy general y que supongo ya han recibido todos los que hemos solicitado la misma información - apela a la Ley Orgánica del Sistema Nacional de Control y de La Contraloría General de la República y a las Normas sobre difusión y acceso a los informes de control gubernamental, también de la Contraloría. No dice cuándo, simplemente dice no.

Pero yo no quiero los resultados de la evaluación de Genaro Matute, que pese a que ya está de salida, ha prometido entregarlos sin falta en dos meses (el informe sobre los trabajadores ya debería estar listo); yo solo quiero ver las boletas de mi congresista. Pero el mismo Matute ha dicho que estos documentos son intangibles.

Bueno, hice todo lo legalmente posible, y yo ya había mandado a pintar su cuarto.


Hey!, no todo está perdido, Godoy nos dice qué podemos hacer.